lunes, 21 de mayo de 2007

Teorías Curriculares

Los principales enfoques curriculares durante el siglo XX
Por: Caldeiro Graciela Paula, Enfoques
teóricos del currículum, Argentina, 2002

Lo que preocupa inicialmente de la teoría del currículum es, tal como señala Domingo Contreras, mostrar cual es el conjunto de decisiones globales que deben tomarse junto a su fundamento para organizar una propuesta de enseñanza consistente y realizable.

A continuación se presentan las principales teorías que han dado sustento al desarrollo curricular grosso modo, se pueden observar 3 grandes enfoques de estas teorías:
1. El enfoque racionalista
2. El enfoque socio-critico y reconceptualista
3. El enfoque cognitivo-constructivista
Se observará cuidadosamente que cada enfoque tiene a su interior distintas sub-corrientes, pero que en lo general siguen los mismos planteamientos teóricos.

1. ENFOQUE RACIONALISTA
Los componentes fundamentales de estas teorías curriculares son:
- El tipo de racionalidad en que se apoya es de tipo empirista, positivista, instrumental, burocrática y cientifista. Racionalidad por otro lado obsesionada por la eficacia.
- Los valores que desarrolla este modelo son los prescritos e imperantes, filtrados por la administración para los diversos niveles educativos a través de programas prescriptivos, obligatorios y cerrados. Más aún, los valores no son ciencia curricular, ya que sólo es científico lo observable, medible y cuantificable.
- La teoría y la práctica son entidades diferentes, pero en todo caso la teoría curricular es externa a la escuela, donde los profesores son meros consumidores y aplicadores de programas oficiales.
- El profesor es un técnico y su modelo profesional es de tipo competencial, cuyo objeto es enseñar como forma de transmitir información “dosificada y elaborada” para ser aprendida e interiorizada.
- La evaluación está centrada en los contenidos y utiliza métodos eficientistas y cuantitativos. Evaluar es medir lo medible y lo no medible se descarta.
- El diseño curricular y la programación adquieren una importancia relevante, con modelos diferentes. Pero el trasfondo es valorar la eficacia a través de objetivos operativos, observables, medibles y cuantificables. Su consecución medida en la evaluación es garantía de éxito.

a) Las teorías experienciales
La obra de John Dewey puede verse como la influencia más notable de este enfoque, en efecto, este pedagogo, postuló una pedagogía centrada en la formación de individuos para la democracia, concebida ésta como una sociedad racional, progresista y humanista. Sus ideas fueron profundamente liberales, en tanto no estaba tan centrada en las necesidades del niño como en la preparación para la democracia. Consecuencia de la fe en la ciencia y en el progreso social basado en la democracia, la educación era el motor del cambio social.

Así, el trabajo de Dewey, inspirador, junto a su seguidor William Kilpatrick, del movimiento de la Nueva Escuela, representó el paso del currículum de tipo clásico (centrado en la mera transmisión y disciplinas y conservaciones de los valores morales) a un currículum que priorizaba la experiencia activa del individuo. Los contenidos y los valores eran importantes en tanto se adquirieran de manera interactiva, por que la escuela debía ser una comunidad democrática en donde el pensamiento se ejerciera libremente y respetando los intereses particulares de los individuos. La psicología de la época, aún siendo de base asociacionista, proporcionó un marco teórico para éstos postulados, porque producía la comprensión del fenómeno de la infancia y su desarrollo.

Las diferentes propuestas generadas por este enfoque, poseen un currículum que no se refiere solamente al plan o programa pedagógico sino que incluye formas alternativas de organización escolar tanto dentro de sus espacios (cocina, talleres, huertas, aulas, etc.) como en sus materiales (recursos, material didáctico, muebles escolares) y tiempos (según se tratara de internados, doble turnos, etc.). Así el currículum experiencial entiende por tal a todas las experiencias de aprendizaje que proporciona la escuela, o el conjunto de experiencias planificadas por la escuela para ayudar a los alumnos a obtener en el mejor grado los objetivos prescriptos. Entonces, dentro de esta concepción, resulta significativa la deliberación de los docentes e implica cierta perspectiva de participación activa en la investigación educativa.

Centrados en las concepciones liberales, los autores de esta línea se concentraron en dar a todos la oportunidad de experiencias educativas, justificando diferencias sociales y logros en las diversas capacidades individuales. En efecto, no aparecen otras explicaciones que permitan comprender resultados diferenciales en el aprendizaje de acuerdo a niveles socio-económicos, etnias u otro tipo de minorías comunitarias.

b) Las teorías clásicas o formativas
La perspectiva de la ciencia aplicada se transforma en hegemónica a partir del siglo XX. La ciencia comienza a entenderse como clave del progreso y esta concepción domina el pensamiento pedagógico, particularmente en los EEUU. La ciencia es un parámetro legítimo incuso para discutir cuestiones meramente axiológicas. Se produce así una priorización de ciencias fundantes con el objeto de comprender la educación cuya aplicación fue luego trasladada al contexto escolar.

El conocimiento, fruto del desarrollo científico, es la base del cambio social. La misión de la escuela sería la de distribuir este conocimiento masivamente, lo cual requería la acción estatal, una presencia mayor en la consolidación de una sociedad caracterizada por un progresivo incremento de la industrialización.

La elaboración del currículum, debía estar pues a la altura de las circunstancias: se aspiraba a responder a las demandas de la sociedad, para lo cual era necesario recurrir a los saberes especializados de diversas ciencias y sus diferentes investigaciones empíricas. La nueva teoría curricular, introducía una división del trabajo en el terreno educativo: los especialistas del currículum por un lado y el profesorado, por el otro. Este enfoque generó una serie de instrumentos para determinar objetivos escolares y secuencias técnicas específicas para elaborar el currículum. Bobbit y Charters son representantes de esta línea, sistematizada y ampliada más tarde por Tyler y Taba.

La diferencia entre estas teorias y las tecnisistas, radica en que los clasicos consideran que los objetivos tienen básicamente un sentido orientador y no regulador, por lo que admiten distintos niveles de precisión, estudiándolos en interrelación con los demás elementos. Los problemas teóricos a estudiar y a resolver en la práctica son muchos por las múltiples interrelaciones. Además, los objetivos tienen que reflejar tanto el contenido al que se aplican como el tipo de actividad mental o conducta en general que desarrollan, porque sobre un contenido se puede ejercer la memorización, el análisis, la crítica, etc. y una actividad mental varía según el contenido al que se aplique. El proceso educativo consiste tanto en el dominio del contenido como en el desarrollo de las facultades. En efecto, para Taba los objetivos son evolutivos y representan caminos por recorrer antes que puntos terminales.

Más allá de estas diferencias de matiz, la intención era la de adaptar los contenidos de la enseñanza correspondientes a una sociedad más avanzada, incluyendo en ellos tanto el conocimiento científico como el conocimiento práctico necesario para la vida.

Resulta paradójico en esta línea que el control social en aumento no podía eludir el pensamiento liberal, esto es, el énfasis en el individuo. La psicología resuelve la contradicción en tanto los objetivos educacionales se expresan siempre en términos individuales.

c) Las teorías Tecnicistas
Durante la segunda mitad del siglo XX, tras las guerras mundiales, el desarrollo económico adquirió un papel decisivo para el cambio social al tiempo que la economía capitalista y el proceso de industrialización comenzó a generar evidentes presiones sobre el sistema educativo. La educación pasó a ser vista como una inversión para el desarrollo, lo cual supone hacer cada vez más eficiente esta inversión. Así la educación alcanza dos funciones esenciales:

1. Formar capital humano: esto es, individuos aptos para aportar al desarrollo económico.
2. Clasificar a los sujetos de acuerdo a sus capacidades: a fin de ocupar los distintos requeridos por el sistema económico.

En efecto, no sólo había que formar a los individuos en conocimientos y destrezas sino también en los valores, disposición y actitudes que eran requeridos para la adaptación de los sujetos al modelo de la sociedad industrial. Así, el currículum debía concebirse como un instrumento eficiente y planificado para asegurar estos logros y dar herramientas a los profesores para que éstos pudieran colaborar con esta necesidad económica a través de la planificación prescriptita y de una batería de tecnologías escolares.

La psicología conductista, aporto el marco teórico necesario para las concepciones curriculares derivadas de este enfoque. Se facilitaron así las técnicas de control del comportamiento como base para la instrucción y para la organización del currículum.

Son representantes de esta línea teórica Gagné, Bloom, y Popham, en ellos se advierte la intención de definir claramente los objetivos conductuales de manera tal que la enseñanza se transforme en un entrenamiento que permitiera ejercitar dichas conductas y sus resultados pudieran ser verificados y medidos. Entonces, el aprendizaje se podía explicar independientemente del contexto, de los sujetos y de los contenidos, lo importante era una adecuada planificación y ejecución que aseguraría los logros. Este marcado tecnicismo acabó postergando problemáticas centrales de la teoría curricular como los contenidos o los principios de selección, haciendo de los aspectos instrumentales (formulación y evaluación de objetivos) la única dimensión desarrollada.

2. ENFOQUE SOCIO-CRÍTICO Y RECONCEPTUALISTA
Mientras los modelos del currículum racional se instalaban como corrientes dominantes en el pensamiento pedagógico, comenzaron a aparecer otras perspectivas, diferentes enfoques que aspiraban a encontrar otra mirada que pudiese echar luz sobre la problemática curricular. Es así como esta corriente surge en los años setenta como una crítica al modelo tecnológico y una búsqueda alternativa de soluciones, en el marco de la dimensión cultural integradora del curriculum. Las primeras críticas, surgieron a partir de un movimiento conocido como conceptual empirismo que, aunque no llegó a convertirse en una línea teórica ya que sus representantes fueron rápidamente adoptando distintas posiciones: algunos se orientaron hacia el reconceptualismo y otros, se inclinaron por posturas prácticas en relación al currículum.

En forma global, diremos que esta concepción curricular se sustenta en un tipo de racionalidad de tipo práctico, desde una síntesis de corrientes: interpretativo- hermenéutica, humanista, liberal, existencialista, interactiva, teórico-práctica.

a) Las teorías reconceptualistas:
Son representantes de la línea reconceptualista, teóricos como Alexandre, Hueber, Pinar, Phenix y Stenhouse. Las principales críticas, se centraban en el rechazo de la teoría como aplicación de meras técnicas, y su objetivo era el de recuperar lo que se consideraba la problemática central del campo. En efecto, tal como señala Schaw (que luego se posicionaría tras las líneas prácticas) el campo curricular se hallaba “moribundo” puesto que, diluido en una serie de enfoques parciales, no había podido avanzar en cuestiones centrales.

Los principios fundamentales que resumen el pensamiento reconceptualista son los siguientes:
- El currículum debe ser percibido como una visión holística, global y orgánica de la gente y en relación con la naturaleza.
- El individuo es el principal agente en la construcción del conocimiento y es tanto portador de la cultura como creador de ella.
- El significado se obtiene desde nuestra experiencia base, por ello es necesario identificar, reconstruir y reorganizar experiencias de base tanto individuales como grupales.
- Las experiencias previas son importantes en el desarrollo significativo del currículum.
- La libertad personal y el logro de altos niveles de conciencia son valores centrales.
- La diversidad y el pluralismo son a la vez fines y medios para lograr estas metas.
- Son necesarias nuevas formas de lenguaje para construir nuevos significados sobre el currículum.

Los elementos centrales puntualizados por Alexander respecto a las nuevas ideas que comienzan a circular en el campo curricular eran:

1. Énfasis en la formación y aplicación de conceptos:
2. La enseñanza de habilidades para el aprendizaje continuo.
3. El desarrollo y uso de materiales variados de instrucción
4. El impacto de los proyectos
5. El papel del maestro
6. Administración para el cambio
7. Los dirigentes del Currículum: al trabajar en cada etapa del proceso pueden ser agentes de poderosos cambios

En síntesis, para los teóricos reconceptualistas, la teoría del currículum se ha alejado excesivamente del interés central del campo: los principios políticos culturales para la selección de contenidos y los principios y justificación o legitimación de esta selección basados en una reinterpretación de la cultura. También se ha alejado el campo del estudio crítico y la construcción de los principios de distribución del saber para guiar la enseñanza a sujetos diversos en contextos distintos.

b) Las teorías de la práctica
En esta corriente podemos distinguir dos formas de entender la teoría- practica curricular, una que ve al currílum como arte de la práctica, diseñada por Schwab, Reid, Walter; y otra elaborada que mira el currículum como arquitectura de la práctica, por Gimeno.
El currículum como arte de la práctica Schwab parte de estas tres cuestiones:

- ¿Qué es el arte de la práctica y cómo se relaciona con el currículum?
- ¿Cuál es el rol de los especialistas del currículum basado en la escuela para buscar el arte de la práctica?
- Cuál es el rol de los especialistas de la universidad o profesores del currículum?

Y precisa su función consistente en un razonamiento práctico y una deliberación y un debate discusión comunitarios, en la medida en que estamos ante una práctica incierta, que exige planteamientos racionales puntuales para abordar una situación tal como se presenta, en momentos concretos, sin poder apelar a normas, técnicas o ideas seguras de validez universal. La deliberación sobre la propia práctica y la reflexión comunitaria sobre la misma supone e implican un punto de partida para su mejora.

El currículum como arquitectura de la práctica:
Este modelo es diseñado por Gimeno(1988) en su obra El currículum: una reflexión sobre la práctica:
Trata de ser un modelo explicativo de la teoría y práctica curricular en sistemas educativos centralizados, con currícula prescriptivos, pero que permiten espacios para la recreación curricular. Pretende buscar desde las prácticas curriculares espacios culturales que desarrollen la autonomía de los centros y de los profesores, al considerar el currículum como una recreación cultural desde la práctica. Distingue en su propuesta dos grandes pasos: el currículum como concurrencia de prácticas y el currículum como arquitectura de la práctica.

c) Las teorías sociocriticas
La concepción socio-critica, denominada también modelo crítico o pedagogía crítica surge a partir de la aplicación a la teoría curricular de los principios teóricos de la escuela de Frankfurt, sobre todo de Habermas. Se desarrolla a partir de los años setenta y llega a la escuela latinoamericana en la segunda mitad de la década de los ochenta, aunque anteriormente se hace presente en la educación de adultos.

Los principales focos geográficos del modelo socio-crítico son:
- La pedagogía crítica radical americana, que pretende una recontextualización socio- crítica del currículum, representada sobre todo por: Giroux, Apple, Pinar,
- La corriente educativo crítica australiana representada, entre otros por Carr,
Kemmis, Bates (1992).
- En América Latina la teoría crítica está representada por Barros, F.Gutiérrez, J. Arroyo, S. Barco.
- En España los principales representantes de este modelo crítico son, entre otros, Sabirón, Gimeno Lorente, Pérez Gómez.

Para la perspectiva crítica, el currículum es una construcción social y como tal, subsidiaria del contexto histórico, los intereses políticos, las jerarquías y la estratificación social y los instrumentos de control y presión ejercidos por distintos grupos.


Esta corriente, se centra más en la comprensión del currículum que en la elaboración pedagógica de propuestas, pero su contribución puede leerse desde el principio que solo comprendiendo como funcionan éstos procesos será posible operar sobre ellos y encontrar alternativas de trasformación.

En su análisis de la teoría crítica, Kemmis, señala que la teoría crítica trata el tema de la relación de la sociedad y la educación y las cuestiones específicas de cómo la escolarización sirve a los intereses del estado y de cómo la escolarización y el currículum determinan ciertos valores sociales y cómo el estado representa ciertos valores e intereses de la sociedad contemporánea. Ofrece formas de elaboración cooperativa mediante las que profesores y otros relacionados con la escuela puedan presentar visiones críticas de la educación que se opongan a los presupuestos y actividades educativas del estado no sólo a través de la teoría sino también de la práctica y su interés se centra en el estado moderno.

La teoría crítica implica una forma de razonamiento diferente de la práctica y la técnica: el razonamiento dialéctico, se rige por un tipo de interés emancipador (Habermas) y adopta una forma diversa de las otras teorías: la crítica ideológica Asimismo, considera como elementos básicos:
- El mantenimiento de los principios de razón y emancipación.
- Cuestionamiento de la filosofía positivista, rechazando el carácter tecnológico de la enseñanza y el currículum.
- Emancipación del individuo por sí mismo, a través del desarrollo del juicio y la crítica.
- Perfección moral por medio del trabajo intelectual y la ilustración a partir de la autoconciencia.
- Evitar la alineación derivada de pseudocultura.
- Formación centrada en el desarrollo de procesos intelectuales y no en el producto de éstos.
- Revindica el derecho a la diferencia y a la singularidad del alumno, animándole a ser fiel a sí mismo para eliminar dependencias.
- La fijación de los objetivos se realiza mediante procesos de dialogo y discusión entre los agentes (Carr, 1989).
- La relación teoría – práctica es indisoluble, a través de una relación dialéctica, a partir del análisis de la contradicción presente en hechos y situaciones. La práctica es la teoría de la acción.
- Los contenidos deben ser socialmente significativos y las actividades constructivas y de aprendizajes compartidos.
- Los medios didácticos que utiliza son productos de la negociación y el consenso, sobre todo de técnicas de dinámicas de grupo y juegos.
- El profesor es definido como investigador en el aula: reflexivo, crítico, comprometido con la situación escolar y sociopolítica. Por otro lado debe primar el trabajo en equipo, como transformador en el aula, de la institución escolar y de su entorno. Para Giroux (1990), el profesor es un intelectual crítico, transformativo y reflexivo, agente de cambio social y político.
- Consideran el currículum oficial un instrumento de reproducción de los modelos de relación y poder para mantener las desigualdades existentes en la sociedad. Su papel es ideológico y es necesario desenmascararlo. De ahí la importancia del currículum oculto.

3. ENFOQUE COGNITIVO-CONSTRUCTIVISTA
En el marco del modelo interpretativo simbólico la corriente cognitiva está adquiriendo una importancia relevante, ya que trata de explicar más allá los modelos de la caja negra los pensamientos del profesor y los pensamientos del alumno.


- Las teorías del procesamiento de la información y su gran desarrollo están impulsados de una manera importante y decisiva sobre esta corriente. Conciben al profesor y al alumno como agentes activos cuyos pensamientos, planes, percepciones influyen y determinan su conducta.
- Principalmente influyen en esta teoria autores como Vygotsky y su zona de desarrollo potencial, el interaccionismo social de Feuerstein, el cognoscitivismo de Piaget y el aprendizaje por el descubrimiento de Bruner, estos impulsan modelos de aprendizaje nuevos, desde una perspectiva constructiva (inductivo – deductiva).
- De igual forma la obra de Ausubel cuestiona la escuela clásica y la escuela activa y sus métodos, impulsando un nuevo modelo de aprendizaje significativo, apoyado en modelos conceptuales y la arquitectura del conocimiento; asimismo, Novack quien junto con Ausbel realizan un análisis cognoscitivo sobre la secuenciación y estructuración de contenidos de aprendizaje, enriqueciendo así esta labor dentro de la perspectiva curricular.

Los principales fundamentos de este enfoque son:
- Tanto el profesor como el alumno son procesadores activos de información, donde el profesor actúa como reflexivo y/o mediador del aprendizaje. Por otro lado se acepta como una evidencia incuestionable que los pensamientos del profesor guían y orientan su conducta, tanto en su fase preactiva como activa.
- El diseño curricular se orienta al desarrollo de capacidades y / o valores como objetivos, que se descomponen en destrezas / habilidades y actitudes. Se trabaja en el aula por procedimientos / estrategias orientados al desarrollo de destrezas (capacidades) y / o actitudes (valores) por medio de contenidos (formas de saber) y métodos (formas de hacer).
- Las tareas / actividades son relevantes en este modelo. Se considera una tarea como un conjunto de actividades orientadas al desarrollo de una capacidad y / o un valor. Las actividades surgen al descomponer una estrategia en sus elementos. Desde esta perspectiva consideramos las actividades como estrategias de aprendizaje.
- Supone una lectura del aprender a aprender como un enseñar a pensar bien, facilitando el uso adecuado de estrategias cognitivas y metacognitivas y de modelos conceptuales. Ello facilita el desarrollo del potencial de aprendizaje y de la inteligencia potencial. Pero para ello es necesario aprender a enseñar.
- El constructivismo, como el cognoscitivismo, se ocupa de la cognición, es decir, del acto de conocer, y su característica fundamental está en postular que la “cognición se produce por construcción...

Bajo estas premisas es el español Cesar Coll, discípulo de Piaget, quien ha implementado un modelo constructivista curricular.

Bibliografía
ALEXANDER, WILLIAM (1991), Cap.3 “La conferencia sobre el contenido”, en: De Alba, A. Díaz Barriga, A. y González Gaudiano, E, El campo del Currículum, Antología. Vol. 1. CESU – UNAM, México, pp. 189-201·

BERNSTEIN, BASIL (1985), “Clasificación y enmarcación del conocimiento educativo”, en: Revista Colombiana de Educación, 1er. Semestre

DAVINI, MARIA CRISTINA (1999), Curriculum, UNQ, Bernal, Enfoques teóricos del currículum, pp 49-79

GIMENO SACRISTÁN, JOSÉ (1986),Cap.2 "El afianzamiento de la pedagogía por objetivos”, en: La pedagogía por objetivos. Obsesión por la eficiencia. Cuarta edición. Morata, Madrid, pp.14-26.

HUEBER, H (1983), Cap.10 “El estado Moribundo del currículum”, en Gimeno Sacristán, José y Pérez Gómez, Angel (comps): La enseñanza, su teoría y su práctica. Akal, Madrid, pp. 210-222. ·

KEMMMIS, STEPHEN (1988), Cap.3 “Hacia la teoría crítica del Curriculum", en: El currículum más allá de la teoría de la reproducción, Morata, Madrid, pp.78-93.

TABA, HILDA (1974),Cap 2 “Conceptos corrientes sobre la función de la escuela", Cap. 21"Modelos corrientes para la organización del Curriculo" y Cap.22 "Estructura conceptual para el planeamiento del Curriculo", en: Elaboración del currículum, Troquel, Buenos Aires, pp. 33-52 y pp. 499-575.

SCHWAB, JOSEPH (1983), Cap.9 “Un enfoque práctico como lenguaje para el curriculum”, en: Gimeno Sacristán, José y Pérez Gómez, Ángel (comps), La enseñanza, su teoría y su práctica. Akal, Madrid, pp. 197-208.

TORRES SANTOMÉ, JURGO (1994), Cap.6 “La planificación del currículum integrado", en: Globalización e interdisciplinariedad: el currículum integrado, Morata, Madrid, pp.185-263.

Planeación Educativa

Frida Díaz-Barriga Arveo, et. al. Metodología de diseño curricular para educación superior, trillas, México, 2005, p.12 – 16


Uno de los factores determinantes en el desarrollo social de un país es la educación: por tanto, ésta debe contribuir al logro de los objetivos socialmente validos, para lo cual se apoya en la planeación.

De acuerdo con Villarreal (1980, pág. 7):
... planear es un acto de inteligencia cuyo propósito es racionalizar la selección de alternativas para el futuro. Implica un ejercicio libre de la razón para definir con claridad los fines a los que se orienta la acción, y desentrañar los mejores medios para alcanzarlos.

Llarena, McGinn. Fernández y Álvarez (1981, pág. 432). Definen la planeación educativa como:
... el proceso que busca prever diversos futuros en relación con los pro­cesos educativos; especifica fines, objetivos y metas; permite la definición de cursos de acción y, a partir de estos, determina los recursos y estrategias mas apropiadas para lograr su realización.

En América Latina, la planeación educativa es relativamente reciente. Durante su etapa de formación recibió diversas influencias, principalmente de Europa, donde la planeación educativa tuvo un gran florecimiento después de la Segunda Guerra Mundial.

La planeación se realiza en todos los ámbitos de la educación desde el nivel elemental hasta el superior; y siempre debe ser visualizada con proyección local y/o nacional.


DIMENSIONES DE LA PLANEACIÓN EDUCATIVA

El alcance de la planeación hace necesario contemplar las dimensiones que se relacionan con ella, entre las que destacan (Llanera. McGinn, Fernández y Álvarez. 1981):

1. Dimensión social: ya que la planeación es realizada por grupos humanos. no puede escapar a su carácter social pues son los propios individuos quienes se verán afectados con la implantación de algún plan, programa o proyecto.

2. Dimensión técnica: toda planeación supone el empleo de conocimientos organizados y sistemáticos derivados de la ciencia y la tecnología.

3. Dimensión política: planear es establecer un compromiso con el futuro; para que una planeación sea variable, debe ubicarse en un marco jurídico-institucional que la respalde, aunque en ocasiones sea necesario promover algún cambio en el marco en que se circunscribe la planeación.

4. Dimensión cultural: la cultura entendida como un contexto, un marco de referencia, un sujeto de identidad o una alternativa en el sistema de valores, está siempre presente en toda actividad humana, por tanto, la planeación educativa es afectada por la cultura.

5. Dimensión prospectiva: esta es una de la dimensiones de mayor importancia en la planeación, pues al incidir en el futuro hace posible proponer planteamientos inéditos o nuevas realidades.

En la siguiente figura (1.1) se esquematizan las dimensiones de la planeación educativa.





Figura 1.1 Dimensiones de la planeación educativa


FASES DE LA PLANEACIÓN
La planeación educativa requiere siempre de un proceso lógico y sistemático con la finalidad de que se realice en las mejores condiciones posibles; en ella se pueden distinguir las siguientes fases:
- Diagnóstico
- Análisis de la naturaleza del problema
- Diseño y evaluación de las opciones de acción
- Implantación
- Evaluación



- Diagnóstico
Constituye el primer eslabón de vinculación con el contexto referencial, las necesidades educacionales, las condiciones de aprendizaje y los factores que afectan el proceso educativo permitiéndonos una aproximación para establecer la nueva programación.

- Análisis de la naturaleza del problema
Es la comprensión integral de la complejidad de la realidad educativa para captar las relaciones externas e internas del entorno educativo, los factores sociales, económicos, políticos y culturales a fin de formular un planteamiento prospectivo.

- Diseño y evaluación de los opciones de acción
La planeación como respuesta de anticipación futurista tiene que desprenderse de la baraja de posibilidades que son más acordes con la realidad educativa deseada en la participación de los actores sean protagónicos y estelares que permitan la transformación de la realidad educativa.

- Implantación
Es la aplicación del planeamiento educativo en una realidad concreta con el fin de resolver las necesidades manifiestas y necesarias de la comunidad educativa que presentó ciertas discrepancias en su evolución.

- Evaluación
Pretende abarcar la variedad de aspectos del plan educativo con la finalidad de establecer balances desde un contexto de proceso, resultados y producto a fin de elaborar marcos teóricos y derivaciones metodológicas para que el programa logre resultados de eficiencia y de optimización del planeamiento educativo.





Figura 1.2. Fases de la planeación



PLANEACIÓN UNIVERSITARIA

Uno de los sectores de la planeación educativa que más interesan es la planeación universitaria; al respecto, Taborga (1980 b, págs. 11-12) considera que esta planeación se debe realizar con base en cuatro supuestos:

1. Supuesto epistemológico.
2. Supuesto axiológico.
3. Supuesto teleológico.
4. Supuesto futurológico.

El supuesto epistemológico establece que "la planeación se fundamenta en un principio de racionalidad (...). Dos aspectos se destacan en este supuesto: primero, los fundamentos conceptuales de la planeación y, segundo, los métodos de conocimiento que se utilizan en el proceso de planeación". El supuesto axiológico "es el que asume determinados valores que sirven para validar y orientar las distintas fases del proceso de planeación, y para diseñar posibles opciones de acción y establecer criterios sobre cuál de éstas es la más conveniente". El supuesto teleológico considera que la planeación está "condicionada al logro de ciertos fines, objetivos y metas". El supuesto futurológico considera que la planeación "posee una dimensión anticipatoria; tiene sentido de futurización".

Para Taborga (op. cit., pág. 15), la planeación universitaria, por su amplitud e importancia, abarca las áreas académica, administrativa, física y financiera, y propone clasificar las concepciones sobre la planeación con el siguiente criterio fundamentado en la temporalidad:

a) Concepción retrospectiva: que se basa en la exploración del pasado.

b) Concepción prospectiva: que se basa en la explotación de un futuro ideal.

c) Concepción circunspectiva: que se basa en la exploración de las circunstancias del presente.

Además, este autor hace hincapié en la planeación prospectiva a la que define como "un proceso racional de pensamiento capaz de proyectar cambios cualitativos en la realidad, acordes con el ideal Universidad" (Ibid., pág. 17).

De acuerdo con Taborga (1980 a, pág. 11), las etapas de la planeación universitaria son:


- Captación de la realidad
- Formulación de valores.
- Diagnóstico de la realidad.
- Futuro deseado de la universidad.
- Medida existente para actuar en la realidad universitaria.
- Futuro factible de la universidad.
- Selección del futuro de la universidad.
- Elaboración de planes y proyectos.
- Ejecución de planes y proyectos.
- Evaluación y seguimiento.

Uno de los aspectos que más ha prosperado en los últimos años en el amplio campo de la planeación universitaria, es el diseño curricular, el cual ha adquirido cada día mayor importancia por la creación de nuevas licenciaturas.

Durante la década de los cincuenta, la enseñanza superior recibió el impacto de la expansión del sistema educativo, trayendo como consecuencia una gran demanda social en este nivel. Durante la década de los setenta se empezó a cuestionar la masificación de la enseñanza. El incremento de la matrícula escolar en el nivel de educación superior ha provocado un aumento considerable de los recursos educativos, lo cual exige una planeación. Asimismo, las necesidades actuales obligan al estudio de una planeación realizable que deberá abarcar las dimensiones: social, técnica, política, cultural y prospectiva.

El diseño curricular forma parte de la planeación educativa, y debe contemplar todas las dimensiones de la planeación, así como las características específicas del nivel educativo al que corresponda. En este caso, se trata del diseño curricular en el nivel de educación superior, y la planeación que se realice al respecto deberá ubicarse en la planeación universitaria.
Concordamos con Villarreal (1980, pág. 7) en que:

... tomar decisiones con base en supuestos y creencias individuales, por autorizados que éstos parezcan, es consecuencia de la falta de visión, de la carencia de objetivos definidos y de la ausencia de métodos.

En la figura 1.3 se esquematizan las fases, dimensiones y sectores de la planeación, así como las áreas de la planeación educativa y los aspectos de cada área.


Bibliografía:
- Llerena, R. Mc. Ginn, N. et al., “Definición del campo de temático de planeación educativa”, en Documento Base, Congreso Nacional de Investigación Educativa, vol. I, México, 1981.
- Taborga, H., “Concepciones y enfoques de planeación universitaria”, en Cuadernos de planeación universitaria, Dirección General de planeación, UNAM, México, 1980 (a)
- Taborga, H., “Etapas del proceso de planeación prospectiva universitaria”, en Cuadernos de planeación educativa, Dirección General de Planeación, UNAM, México, 1980 (b)
- Villareal, E., “La aplicación del método dialéctico estructural en el diseño académico”, en Pensamiento Universitario, Coordinación de Humanidades, UNAM, México, 1978.
- Villareal, E., “La planeación académica integral”, en Cuadernos de planeación universitaria, Dirección General de planeación, UNAM, México, 1980.

Teoría del currículum

Gil Fernández, Pilar, et al. (Eds), “Teoría del currículo” en Diccionario de las ciencias de la educación, Santillana, México, 1995, pp. 345-347


(Pedag.) Resulta problemático concretar el significado de lo que es una teoría curricular y el papel que desempeña o tiene que desempeñar, cuando el propio significado de lo que es una teoría es polivalente, considerando que el concepto de currículo tiene múltiples acepciones dentro de la bibliografía especializada.

Al referirnos a currículum se requiere señalar el listado de contenidos, objetivos y actividades que se desarrollan en la institución escolar a un nivel determinado. Pero tomando el término en una acepción científica, como cuando se habla de teorías del currículo, se suele querer significar un marco de discusión para fundamentar y dar justificación a lo que señala y al cómo se hace.

La teoría del currículum nace en torno a 1918, cuando F. Bobbit publica su obra The Curriculum. La esencia del planteamiento de este autor consiste en la búsqueda de una racionalización de la práctica escolar tendiente al logro de los resultados de aprendizaje por parte de los alumnos que los capaciten para el desempeño efectivo de las actividades necesarias a la sociedad en un momento dado. Es decir, que la práctica didáctica tiene que estar gobernada por un orden que asegure una eficacia.

Si bien este enfoque utilitarista no se ha perdido del todo, cuando hoy se reclama una teoría del currículum se hace por la urgencia de disponer de un marco teórico de ideas relacionadas entre sí que den una justificación a la práctica didáctica. La teoría aquí se entiende como el análisis sistemático de unos conceptos y una problemática interrelacionados, con afán de clarificar un campo de estudio de las ciencias de la educación de enorme importancia en el que encontrar inspiración y justificación para las iniciativas que se han de desarrollar en la práctica. Es, pues, ante todo, un esquema ordenador de numerosas aportaciones para poder extraer de él iniciativas de acción práctica.

La teoría del currículum se ha ido construyendo de forma sistemática y parcialmente. Se ha atendido a capítulos como objetivos, contenidos, métodos, funciones del profesor, etc., de forma sucesiva o aislada, separando la problemática dentro de cada apartado del resto. Principalmente una de las virtualidades que en el ámbito de lo especulativo tiene la teoría curricular es la de armonizar el desarrollo del pensamiento de estos temas de forma ordenada y congruente, procurando un conocimiento globalizador del sistema que constituyen los distintos elementos de la teoría curricular. En este sentido esta teoría puede decirse que está en sus inicios, a pesar de las meritorias que son algunas de las aportaciones de que ya disponemos, siendo una temática que se superpone a lo que en nuestro contexto cultural se ha venido entendiendo por didáctica.

La teoría del currículum. se ocupa de justificar la enseñanza intencional y por ello planificada de alguna manera, lo que plantearse que contenidos se van a enseñar, por qué seleccionar esos contenidos y no otros, con qué criterios se seleccionan, al servicio de qué objetivos, con qué orden se enseña, por medio de qué actividades, de qué agentes puede uno servirse, con qué normas se regulará el proceso, y cómo se comprobará que las decisiones tomadas son adecuadas o no. Este sería el contenido de la teoría del currículum. desde una perspectiva.

Pero además, es misión de esta teoría no sólo el conocer los temas y los interrogantes que surgen al poner en relación las opciones posibles en torno a esos núcleos temáticos, sino que debe organizar y guiar el desarrollo en la práctica del diseño de los planteamientos teóricos previos.

Una de las promesas más atractivas de la teoría del currículum reside en su pretensión de establecer un puente recíprocamente fecundante entre los planteamientos de la teoría pedagógica o de sus fundamentos filosóficos, sociológicos y psicológicos, y la práctica de la enseñanza. La teoría del currículum es una teoría práctica o aplicada – una tecnológica – que pretende dirigir la acción coherentemente con unos planteamientos teóricos previos. Al tiempo recogerá los interrogantes que surgen en esa práctica fundamentada para discutirlos dentro de los correspondientes campos de fundamentación científica.

El punto de partida de la teoría del currículum son las bases que le ofrecen la filosofía, sociología, psicología, y epistemología. A partir de ahí discute los elementos propios a través de esas lentes fundamentales, así como las interacciones entre esos elementos que mencionamos anteriormente, y por medio de un complejo proceso de toma de decisiones elabora un proyecto de acción o diseño (lo que entre nosotros conocemos más corrientemente como programaciones). Finalmente, la t. del c. guiará el desarrollo de ese diseño con los retoques que se estimen oportunos al enfrentarse con la práctica. Tal teoría del currículum es hoy algo incipiente, pero con aportaciones y enfoques prometedores.

jueves, 17 de mayo de 2007

Acercamiento al Curriculum

Casarini Martha, Teoría y diseño curricular, Trillas México, 1997, p.4-15


Al comenzar el estudio del currículum es deseable adoptar una actitud abierta y exploratoria a fin de iniciar un proceso de acercamiento progresivo del tema. Se considera que tal actitud permitirá, en primera instancia, partir de lo que los lectores saben sobre este tema, basados en su practica. Al mismo tiempo, se cree que se logrará la incorporación de nuevos conocimientos sobre dicho tema.


El currículum y sus significados: el primitivo uso del término
Para comenzar el estudio de los significados del currículum es preciso hacer una consideración previa de índole etimológica. La palabra currículum es una voz latina que se deriva del verbo curro y que quiere decir" carrera"; alude a una pista circular de atletismo (a veces se traduce como pista de carrera de carros). En el latín clásico se utiliza curriculum vitae o curriculum vivendi haciendo referencia a una carrera de vida.

Según H. Aebli (1991 p. 241): "La expresión 'currículo', hablando gráficamente, significa que los alumnos se dirigen a su objetivo (currere en latín, significa caminar; los currículos son los caminos del aprendizaje)."

Históricamente -fines del siglo XVI- los jesuitas usaron el término disciplina para describir los cursos académicos, aludiendo así a un orden estructural más que secuencial, y el término ratio studiorum para referirse a un esquema de estudios, más que a una tabla secuencial de contenidos o syllabus. El término currículum asimiló ambos sentidos (estructura y secuencia), de modo que al combinarlos se obtiene la noción, por una parte, de totalidad -ciclo completo-, y por la otra, de secuencia ordenada de estudios. Esto Último permite entender por qué, metafóricamente, se asimila currículum a carrera, es decir, a algo que progresa, que avanza.

Este breve recorrido etimológico del término es sólo un punto de partida, pues las diversas connotaciones que a lo largo de los siglos se le han dado (y que se le dan en el presente) al término currícu!um nos permiten entrever la complejidad de su conceptualización. Ahora bien, ¿por qué el acercamiento a la definición de currículum plantea obstáculos e incógnitas? La razón es que las ideas sobre currículum no son universales, es decir, no están más allá de las determinantes históricas. Por el ­contrario, el currículum es un producto de la historia humana ­social, así que cambia -como todas las construcciones sociales- de ­tiempo en tiempo, de acuerdo con las transformaciones e innovaciones en las ideas, en las utopías, en la ordenación de la vida social, en ­la estructura de los discursos sobre la vida pública y privada, etcétera.

Por lo anterior, pareciera que no se puede definir el currículum sin plantear previamente una visión del mundo que opere como marco de referencia de dicha definición y, al mismo tiempo, la haga comprensible.

En síntesis, el estudioso del currículum necesita desarrollar una visión histórica amplia acerca de éste como objeto de estudio, puesto que no es inmutable; por el contrario cambia y se transforma en respuesta a las circunstancias históricas, a las estructuras económicas y políticas, y a los intereses humanos, así como a las motivaciones personales y grupales de los sectores que elaboran la currícula.

Si se acepta lo anterior se entenderá que las dificultades de conceptualización del currículum no reflejan más que las existentes en la realidad a la que hacen referencia, y las diversas posturas políticas, ideológicas, culturales y académicas que históricamente se han presentado y que han condicionado tanto el campo curricular como el de su enseñanza. Algunas de estas cuestiones podrán apreciarse mejor al abordar el apartado dedicado a las teorías curriculares.

En este punto es necesario entrar de lleno al concepto de currículum, a fin de elaborar o reelaborar alguna definición que proporcione al lector una visión más clara del tema de estudio.


Algunas definiciones
Antes de ver las definiciones, habrá que recordar que el currí­culum es, en gran medida, de naturaleza prescriptiva, es decir, se aspira a definir algo que se caracteriza por ser una pretensión de realidad, un querer ser, un deber ser. Lo anterior supone circunscribir y seleccionar un conjunto de intencionalidades que se conside­ran como las "verdaderas" o "mejores" respecto a otras; aquí entran en escena las diferencias de valor que permiten legitimar ciertas posiciones y excluir y rechazar otras. Esto no debe inducir a pensar que estas posiciones son arbitrarias, es decir, que en última instancia da lo mismo elegir una conceptualización u otra. Por el contrario, la elección de uno u otro concepto de currículum depende de la capacidad para integrar en un esquema prescriptivo para la acción, tanto las reflexiones derivadas de la práctica como los aportes teóricos provenientes de la investigación curricular, de la enseñanza y del aprendizaje.

Stenhouse (1987, pp. 28-29) comenta tres definiciones del currículum:
He aquí tres importantes definiciones americanas del currículum:
Es el conjunto de experiencias planificadas proporcionadas por la escuela para ayudar a los alumnos a conseguir, en el mejor grado, los objetivos de aprendizaje proyectados según sus capacidades. (Neagley y Evans, 1967, p. 2)
Es el esfuerzo conjunto y planificado de toda escuela, destinado a conducir el aprendizaje de los
alumnos hacia resultados de aprendizaje predeterminados. (lnlow, 1966, p. 130)

En vista de las deficiencias de la definición popular, diremos aquí que currículum es una serie estructurada de objetivos de aprendizaje que se aspira lograr. Éste prescribe (o al menos anticipa) los resultados de la instrucción. (Jhonson, 1967, p. 130)

Como se puede apreciar, los conceptos anteriores encuentran su sentido y razón de ser en el contexto de un modelo curricular que apunta a logros terminales de los alumnos luego de haber cumplido con un plan de estudios programado en el tiempo. Desde esta perspectiva, la educación es un medio para alcanzar un fin (considerado éste como resultado del aprendizaje), por lo que, el currículum es la planeación necesaria tanto de los fines -resultados de aprendizaje-, como de los medios educativos para obtenerlos. En la categoría de medios cabe la planeación de todos los componentes del diseño, un programa curricular para la conducción de los procesos de enseñanza-aprendizaje de cualquier nivel educativo.

Es necesario detener esta lectura y preguntarse si estas reflexiones, desarrolladas a partir de las anteriores definiciones de currículum, cubren de manera adecuada los requerimientos de un primer acercamiento. Para ello nos preguntamos: ¿Es el currículum una planeación que prevé todos los aspectos posibles a desarrollar? ¿Qué tan abierto o cerrado puede ser el plan curricular? ¿El currículum formula necesidades como conductas terminales? ¿Puede el currículum anticipar también los procesos a desarrollar? ¿Existen otras alternativas al modelo medio-fines?

A partir de la última pregunta retomamos las definiciones de currículum, a fin de ampliar su análisis. Veamos: hasta el momento el énfasis está puesto en el currículum como prescripción –por escrito- de lo que se pretende que debe suceder en las escuelas, pero también hay definiciones en las que se prefiere asociar el currículum a la realidad escolar (y no al documento escrito). Kansas (1958), citado por Stenhouse (1987, p. 26), señala que: "El c. es, fundamentalmente, aquello que acontece a los niños en el colegio como resultado de la labor de los profesores. Incluye todas las experiencias de los niños cuya responsabilidad asume el colegio."

Al analizar la definición anterior se observa que al autor le interesa lo que ocurre en la situación real; pretende entender el currículum como lo que sucede en la escuela y el aula. Desde esa perspectiva, el estudio del currículum es un estudio de caso, pues el documento que se origina -más que atender a un deber ser prescriptivo- persigue un estudio antropológico y sociológico de la escuela como agente de enseñanza y aprendizaje. Por tanto, el currículo debe reflejar algo más que intenciones, debe, además, indicar cuál es el modo de llevar a cabo dichos propósitos a la práctica y debe especificar los criterios que presiden el modo de hacerlo.

De tal manera, el currículum es visualizado, por una parte, como intención, plan o prescripción respecto a lo que se pretende que logre la escuela; por otra parte, también se le percibe como lo que ocurre, en realidad, en las escuelas. Esto le hará expresar a Stenhouse (1987, p. 27) que: "el
estudio del currículum se interesa por la relación entre sus dos acepciones: como intención y como realidad." Las dos acepciones nos remiten a la vieja (y siempre nueva) cuestión de la relación teoría-práctica; por ello, el autor citado (1987, p. 27) expresa: "El problema central del estudio del currículum es el hiato existente entre nuestras ideas y aspiraciones y nuestras tentativas por hacerlas operativas."

Esta visión del currículum permite organizar su estudio a través de ciertas categorías de análisis.

Algunas otras definiciones sobre currículum (Luis González Martínez):
“Es el contenido general de la educación del hombre normal” (Henry c. Morrison)

“Es la secuencia de experiencias potenciales que se organizan con el proposito de disciplinar al niño y al joven en formas grupales de pensar y actuar” (R.C. Doll)

”El currículum comprende de todas las experiencias de aprendizaje que proporciona la escuela...un plan curricular es el arreglo previo de todas estas experiencias para una población particular de estudiantes” (G.C. Saylor y W.M. Alexander)

“El currículo es el conjunto planeado de encuentros humanos pensados con el fin de optimizar el aprendizaje... es también un ejemplo amplio de la gama total de conocimientos, en la medida en que estos se reconstruyen y amplían a través de la investigación, el contenido curricular y sus procesos deberán adecuarse de igual manera” (l.C. Wilson)

“Para lograr un concepto emergente de currículum, es necesario considerar todo el programa educativo como una totalidad compuesta, de tres elementos fundamentales: un programa de estudios, un programa de actividades y un programa de orientación) (A.L. Clicer)

Currículum formal, real [o vivido) y oculto Tanto el plan de estudios (currículum formal) como sus programas de cursos representan el aspecto documental de un currículum. Es interesante señalar que la palabra programa significa -etimológicamente-: "anunciar por escrito"; los programas constituyen las microestructuras de un plan de estudios y por lo común indican:

· Objetivos generales y particularidades de aprendizaje.
· Organización y secuenciación de contenidos.
· Actividades de aprendizaje y estrategias de enseñanza.
· Modalidades de evaluación y distribución del tiempo.

En síntesis, el plan de estudios y los programas son documentos -guías- que prescriben las finalidades, contenidos y acciones que es necesario llevar a cabo por parte del maestro y sus alumnos para desarrollar un currículum.

El currículum real (o vivido) puesta en práctica del currículum formal con las inevitables y necesarias modificaciones que requiere la contrastación y ajuste entre un plan curricular y la realidad del aula. No habrá que olvidar que el currículum real encuentra su razón de ser en la práctica educativa.

Figura 1.1. Precisiones y distinciones del concepto currículum.



Es en dicha práctica donde concluyen y se entrecruzan, de manera más o menos equilibrada y conflictiva, diversos factores. Entre estos factores se encuentran tanto el capital cultural de maestros y alumnos, como los requerimientos del currículum formal, los emergentes no previstos de la situación colectiva del aula y otros factores socioculturales, económicos y políticos presentes en el contexto social de la institución educativa en espacios y tiempos específicos; asimismo, maestros y alumnos con similares o distintas inserciones sociales e historias personales concepciones diversas sobre una variedad de asuntos vitales generan la apropiación de conocimientos, valores, habilidades, actitudes y destrezas, en el transcurso del proceso de enseñanza y aprendizaje. Lo anterior justifica el establecimiento del currículum real como una categoría de análisis.

Por otra parte, el currículum oculto es una categoría de análisis que nos permite interpretar con mayor precisión la tensión existente siempre entre intenciones y realidad, entre currículum formal y currículum real. El currículum oculto es, según Arciniegas (1982, p. 75): “proveedor de enseñanzas encubiertas, latentes, enseñanzas institucionales no explícitas, brindadas por la escuela -puesto que ésta es un microcosmos del sistema social de valores-“.

Ya que la educación no es un proceso neutro y aséptico, es inevitable y necesario el componente ideológico, moral y político que existe en cualquier empresa educativa que los seres humanos emprenden. De ahí la presencia del currículum oculto, tanto en el currículum formal como en el currículum real, a través de los lenguajes implícitos -verbales, escritos, gestuales-. Como señala McLaren (1984, p. 224):

El currículum favorece ciertas formas de conocimiento sobre otras y afirma los sueños, deseos y valores de grupos selectos de estudiantes sobre otros grupos y a menudo discrimina a partir de la raza, la clase y el género. En general los teóricos críticos están interesados en cómo las descripciones, las discusiones y representaciones en los libros de texto, materiales curriculares, contenidos de cursos y relaciones sociales materializadas en la práctica en las aulas benefician a los grupos dominantes y excluyen a los subordinados. En este contexto frecuentemente se refieren al "currículum oculto".

El concepto de currículum oculto se convierte en una categoría polémica, pues dependiendo de la visión socio-antropológica que se tiene de la escuela y la educación, así se da el balance que los estudiosos hacen de esta categoría. Algunos ven en el currículum oculto una herramienta de socialización provechosa, o por lo menos necesaria, puesto que la escuela debe cumplir con la función de adaptar niños y jóvenes al medio social. Otras perspectivas más críticas cuestionan el enfoque adaptativo, pues lo consideran una visión conservadora del conocimiento, y a éste, como algo que debe ser aprendido; los alumnos son concebidos como individuos pasivos y reproductores del conocimiento y los valores legitimados. Las posiciones de las cuales estamos haciendo un breve resumen han sido organizadas por Giroux (1990, p. 122) en tres enfoques: "tradicional, liberal y radical".

Más allá de las diferencias significativas existentes entre dicha enfoques, el elemento común en los tres es el señalamiento que hace del currículum oculto como una herramienta interpretativa que permite registrar el modo de operar de la escuela como institución social: ¿por qué y cómo se legitiman ciertos contenidos educativos frente a otros?, ¿cuál es el papel social que como autoridad cumple el maestro? ¿cómo se reproduce el conocimiento válido?, etcétera.

La distinción entre currículum formal, currículum real y currículum oculto tiene por objeto reafirmar el análisis sobre las intenciones curriculares (currículum formal, currículum oculto) y las concreciones en el desarrollo curricular (currículum real - currículum oculto). Por lo tanto, siempre que nos refiramos a currículum, en éste texto, estaremos englobando en ese concepto tanto las tres categorías enunciadas, como sus aspectos teórico y práctico, es decir, intenciones y desarrollo curricular. A partir de lo anterior, estamos en condiciones de formular algunas preguntas.

¿El currículum es la prescripción? ¿Es el plan? ¿Es la práctica? ¿El currículum engloba ambos procesos? ¿Existen planes curriculares que de manera no siempre consciente tienden a disociar la teoría y la práctica? ¿Cuáles son? ¿Hay ejemplos? ¿Existen otras formas curriculares que coayudan a lograr la vinculación teoría-práctica? ¿Es necesario pensar de otra manera la gestión educativa y el papel de los maestros para mantener la relación entre intenciones y realidad?

A fin de cerrar este apartado, introducimos otra definición de currículum enunciada en el texto de Diseño curricular base (1989, p. 21 que integra aspectos de la reflexión anterior:

El currículum se entiende como el proyecto que determina los objetivos de la educación escolar, es decir, los aspectos del desarrollo y de la incorporación de la cultura que la escuela trata de promover y propone un plan de acción adecuado para la consecución de estos objetivos. El currículum tiene, por lo tanto, dos funciones diferentes: la de hacer explícitas las intenciones del sistema educativo y la de servir como guía para orientar la práctica pedagógica.

He aquí un planteamiento sobre el currículum que trata de vincular los dos aspectos mencionados: intenciones y realidades. Lo ante­rior nos encamina a la ampliación que realizaremos del término currículum al mismo tiempo que nos permitirá formular algunas precisiones.

Ampliación del concepto
El currículum como proyecto: Hay que pensar el currículum en términos de proyecto; esta denominación es más abarcativa que la de plan de estudios entendido, de manera tradicional, como selección y secuencia de contenido. La idea de proyecto permite visualizar al currículum como la propuesta que determina lo que ocurre en el aula entre maestros y alumnos. De allí la afirmación de que el currículum es un instrumento potente para la transformación de la enseñanza y, por ende, una fecunda guía para el profesor. La propuesta curricular es el marco que opera como referente orientador de la práctica del maestro; sin embargo, al mismo tiempo, dicha práctica retroalimenta el rediseño de la propuesta original.

Algunos estudios del currículum, como los realizados por Glazman e Ibarrola (1983, p. 283), le otorgan un carácter más trascendente a la idea del currículum como proyecto:

El proyecto universitario comprende la propuesta de finalidades políticas académicas precisas, a partir de una definición de las posiciones ideológicas adaptadas por la universidad y del compromiso que asumen en el tratamiento y solución de la problemática social, filosófica, científica, y técnica del país.

Para estas autoras es necesario contar con este tipo de referente para luego abocarse a las tareas de planear, diseñar y realizar el currículum.


Relaciones enseñanza-currículum
A partir de lo anterior se deduce que si el currículum es el proyecto que integra teoría y práctica, el maestro ya no es el simple ejecutante que permanece estático, sino un sujeto activo y con iniciativa. Esto significa establecer una nueva relación entre enseñanza y currículum. La enseñanza estudia el complejo sistema de intercambios que se producen en el aula cuando se trabaja en un proyecto curricular determinado (Pérez G., 1992). ¿Hasta qué punto es pertinente distinguir entre enseñanza y currículum? La distinción se realiza cuando se piensa que el currículum establece las metas a alcanzar y la enseñanza se ocupa de los medios que se utilizan en el logro de los fines. Sin embargo, también se sostiene que el proceso por el que se pretende lograr las finalidades educativas es inseparable de las metas que presiden dicho proceso.

El currículum -como concreción pedagógica de la cultura, la ciencia, el arte y la técnica- es realizado en un contexto institucional singular de relaciones de intercambio que se modifica individual y colectivamente como consecuencia del trabajo didáctico y experimental del propio currículum.

Se concluye que es posible distinguir entre currículum y enseñanza, pero que también es posible (y necesario) admitir la integración de ambos. No obstante, observaremos más adelante que algunas teorías curriculares no le confieren la misma importancia a dicho vínculo.


Relaciones cultura-currículum
Las reflexiones previas preparan el terreno para el análisis de las relaciones entre cultura y currículum.

Veamos: en general, la cultura se percibe como el conjunto de representaciones individuales, grupales y colectivas que otorgan significado a los intercambios entre los miembros de una comunidad. En una visión amplia del concepto cultura incorporamos costumbres, creencias, ideologías, lenguajes, conceptos, instituciones sociales, políticas, educativas, etc. Este conglomerado de aspectos constituye las respuestas producidas por los hombres -como sociedad y a lo largo de su historia- para satisfacer sus necesidades y resolver sus problemas.

Ahora bien, cada grupo social, desde siempre, enfrenta el problema de conservar sus creaciones culturales y al mismo tiempo acrecentarlas y trasmitirlas, puesto que su propia sobrevivencia física, emocional y cognitiva depende de esos procesos. Esta necesidad da origen a un conjunto de prácticas sociales que tendrán por objeto propiciar que los miembros de un grupo social asimilen aquellos múltiples aspectos de la cultura, a fin de incorporarlos como miembros activos en la conservación de ésta y, al mismo tiempo, como agentes creadores de nuevas formas culturales. Coll (1987) señala que ese conjunto de prácticas sociales constituye la educación.

Por otro lado, a través de la educación escolarizada se arriba al concepto de currículum. Se puede entonces triangular cultura, educación y currículum a fin de registrar sus relaciones mutuas. Tal como se observa en la figura 1.2, dichas relaciones tienen su fundamento en la misma evolución de la especie humana; es ideosincrático de ésta incorporarse a la cultura mediante elaboraciones e interpretaciones singulares de la misma, que poseen un distinto matiz de éxito o fracaso de acuerdo a las características de sus experiencias e intercambios y del carácter del medio con el cual y en el cual se interactúa. Si bien dichas elaboraciones comienzan desde el nacimiento, hay que analizar qué sucede con ellas cuando el sujeto ingresa a la escuela.
Figura 1.2. Relaciones cultura-educación-currículum

Al iniciarse el proceso escolar, el alumno entra en contacto con los productos más elaborados de la ciencia, el arte y la técnica, es decir, recibe una cultura académica; entrar en contacto significa que el aprendiz incorpora cognitiva, emocional, motriz y actitudinalmente esa cultura académica, y al hacerlo, prosigue el proceso de socialización iniciado en la familia. Dicho proceso es fundamental para considerar al individuo como parte de la comunidad humana; esto es, el "hacerse" persona supone un proceso de socialización altamente determinado por la cultura en la que el sujeto nace y por los eventos educativos, informales y formales, involucrados en ese proceso socialización.

Las reflexiones anteriores permiten entender que el diseño de currículum es algo más que seleccionar objetivos, desarrollar actividades de aprendizaje y evaluar resultados. Por el contrario, siguiendo las reflexiones previas pareciera que es necesario construir un esquema de pensamiento sobre el currículum de modo que dicha mentalidad curricular ofrezca una visión más comprensiva y completa de aquél (teoría y práctica).

Tal esquema de pensamiento requiere de una incorporación de ideas, tendencias y perspectivas político-éticas, socioculturales, científico-académicas y pedagógico-técnicas, que reclaman tanto una reflexión sistemática como una organización y clasificación, a fin de no caer en yuxtaposiciones o agregados de posiciones y decisiones sin ningún sentido. No hay que olvidar, además, que cualquier perspectiva está mediada por aspectos valorativos incluyentes de ciertas posiciones y excluyentes de otras y, por último, que todo este edificio observa siempre un carácter prescriptito - práctico.

Es obvio que los señalamientos anteriores provocan varias interrogantes, tanto en el estudioso como en el práctico del currículum, entre las que destacan aquellas que consideran los aspectos que hemos estado estudiando: ¿Puede ser el currículum un medio para que el profesor aprenda sobre la naturaleza de los alumnos y la naturaleza del conocimiento que imparte, es decir, para que pueda aprender de su práctica y esto le exija y estimule pensar y repensar las cuestiones curriculares de manera permanente? ¿Es posible concebir al currículum como un proyecto educativo que otorgue importancia a la naturaleza de los contenidos culturales y redefina el proceso de enseñanza (y aprendizaje)? ¿Es posible diseñar un currículum que guíe su desarrollo por la práctica anticipándose además a ciertos imprevistos de la gestión curricular?

La complejidad del tema curricular explica por sí misma la atracción, tanto de los teóricos como de los prácticos, por fundar y utilizar teorías curriculares. La tentación es enorme porque se aspira a contar con un marco ordenador de ideas, procedimientos y aplicaciones. Aquí pretendemos demostrar la manera en que las opciones seleccionadas a la hora de planear un currículum están en gran medida determinadas por el concepto de currículum que tengan sus creadores. También observaremos cómo esas opciones repercuten en el plano del análisis y en el de la práctica, reforzando ciertas visiones curriculares y excluyendo otras.

miércoles, 9 de mayo de 2007

Guía del Trabajo Final


UNVERSIDAD ESPECIALIZADA DE LAS AMÉRICAS

Postgrado en Evaluación y Acreditación de la Educación Superior
Facilitadora: Dra. Amira Abood de Lalo

PLAN DE ACTIVIDADES

Uso de la Tecnología en un Ambiente Aplicado


A. OBJETIVOS DEL TRABAJO
1. Tecnológicos.

1.1 Distinguir entre entornos virtuales de aprendizaje y contenidos multimedia para el aprendizaje.
1.2 Conocer las herramientas que permiten el diseño y desarrollo de materiales didácticos multimedia.
1.3 Entender las claves de la transformación tecnológica de los entornos de aprendizaje.
1.4 Explicar la interactividad de los medios tecnológicos utilizados en el E-Learning y su inserción en el tema seleccionado.
1.5 Identificar los elementos del diseño instruccional.
1.6 Diseñar elementos introductorios de un programa educativo en Línea.


2. Aplicado al Tema del Postgrado.


2.1 Seleccionar uno de los temas sobre:
- La calidad en América Latina perspectiva comparada
- El sistema universitario como punto clave para el desarrollo de la dimensión cultural en Panamá
- Estudio de nuevas necesidades docentes e implantación progresiva de los cambios
2.2 Elaborar una síntesis del tema seleccionado.
2.3 Presentar la estrategias metodológicas empleadas.
2.4 Organizar los contenidos.
2.5 Diseñar la presentación.
2.6 Intercambiar con los participantes el avance del proyecto.
2.7 Realizar la presentación final.



B. PLAN DE ACTIVIDADES
Los participantes deberán organizarse en 5 equipos de trabajo, de acuerdo a las siguientes instrucciones:
1. Planificación de la Actividad:

1.1 Defina su equipo de trabajo e informe a la facilitadora del Curso los nombres de los participantes.
1.2 Elija el objetivo(s) que cumplirán.
1.3 Presente el tema de aplicación seleccionado sobre una Herramienta de Web 2.0.
1.4 Presente su plan de actividades para lograr la implementación de su proyecto.
1.5 Diseñe su proyecto en todas sus fases: análisis, diseño, desarrollo, implementación y evaluación.
1.6 Avanzar en las dinámicas de trabajo en equipo y trabajo colaborativo (utilice la Sección de foro).
1.7 Creación y gestión de una Biblioteca de Recursos por parte del bibliotecario de los equipos.

C. DESARROLLO DE LA ACTIVIDAD

1. Elabore un documento utilizando una herramienta análoga en versión free, no menos de 10 pantallas o textos, una Herramientas de Web 2.0 (se admiten propuestas alternativas sobre el tema).

2. El nivel que cada participante desee alcanzar en la elaboración de la presentación dependerá de sus conocimientos y capacidades previas, sin que sea este el principal criterio de evaluación. Por supuesto, pueden realizar aportaciones más avanzadas que son francamente enriquecedoras para todos.




D. APOYO PARA EL DESARROLLO DE LA ACTIVIDAD

Esta actividad contará con el Foro 4 específicamente creado para solucionar dudas y problemas. Se valorará especialmente la cooperación, la ayuda y la construcción colectiva, así como la pertinencia y oportunidad de las intervenciones en el foro. Traslade en este foro sus dificultades, sus hallazgos y el resultado de su trabajo, de esta manera podemos apoyarlos durante estas tres semanas.



E. FACTORES DE LA ACTIVIDAD

Todas las participaciones y actividades contribuyen a generar la evaluación final del participante. Deseo aclarar que para estar al día en este modulo, es necesaria una ingente labor de búsqueda e investigación en la red, aprecio y valoro especialmente la iniciativa propia y el trabajo colaborativo, cooperativo y de ayuda a los compañeros desarrollado en los foros.




DURACIÓN: Del 10 al 24 de Mayo del 2007.

10.....Sistematización y presentación de la información
10.....Estructura y metodología del trabajo en equipo
10.....Documentación y fuentes consultadas
30.....Aplicación de conocimientos
20.....Aportación del grupo
10.....Conclusiones y recomendaciones
10.....Entrega las actividades en tiempo y forma


F. HERRAMIENTAS

Adjunto diversos enlaces relacionados con las diferentes propuestas de actividades, en absoluto es una lista exhaustiva ni limitada. Una forma muy interesante de ampliar sus conocimientos en la temática de nuestro módulo es recorrer estos enlaces e informarse sobre lo que se está "produciendo en nuestro entorno".




Google spreadsheet (hoja de cálculo)
www.google.com/googlespreadsheets/tour1.html

Enlace Writely (procesador de texto)
http://www.google.com/support/writely/bin/static.py?page=faq_es.html&hl=es

Enlace a un paquete similar a office de MS, pero WEB 2.0
http://www.thinkfree.com/common/main.tfo

Búsqueda social Enlace a technorati:
www.technorati.com

Enlace a Digg:
http://digg.com

Enlace a docentes
http://www.docencia.es

Marcadores sociales Enlace del.icio.us
www.delicio.us.com


Enlace a Flickr
http://www.flickr.com/


Enlace a YouTube
http://www.youtube.com


Editores de audio, Podcast Enlace a Audacity (editor de audio free)
http://audacity.sourceforge.net/


Conversión free pdf
http://html2pdf.seven49.net/


Conversión Flash de powerpoint
http://www.masternewmedia.org/es/2004/10/03/como_convertir_powerpoint_a_flash.htm


Open office (paquete free similar al de MS)
http://es.openoffice.org/


Autoevaíuaeiones Enlace Hot Potatoes
http://hotpot.uvic.ca/


Tutorial de Hot Potatoes
http://platea.pntic.mec.es/~iali/CN/Hot_Potatoes/intro.htm





G. LECTURAS Y ENLACES COMPLEMENTARIOS

Objetos y diseños de aprendizaje reutilizables y repositorios: Una Aproximación al Diseño de una Guía de Buenas Prácticas en torno al Paradigma de los Learning Objects: Sergio Monge, Iker Azpeitia y Ramón Ovelar

http://www.uoc.edu/symposia/spdece05/pdf/ID14.pdf


Introduction to LAMS - Esta animación muestra de forma breve la forma de trabajo de LAMS
http://lamsinternational.com/demo/intro_to_lams.html

-Redes sociales

Aprendiendo a expresarse con weblogs - Rafael Robles
http://dewey.uab.es/pmarques/dim/revistaDIM/aprendiendo%20a%20expresarse%20con%20weblogs.doc


Web Educativa 2.0 - Wiki de Aníbal de la Torre
www.adelat.org/wiki/index.php/Portada


Blog de Fernando Santamaría
http://gabinetedeinformatica.net/wp15/ponencias

-Diseño de contenidos
El diseño de contenidos multimedia para entornos virtuales de aprendizaje (2003). Carles Dorado profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona
http://dewey.uab.es/cdorado/Articulos/DISENO_%20CONTENIDOS_%20MULTIMEDIA.pdf

Un Ejemplo de un trabajo final de un curso anterior:

Proyecto de Noriema Gayle y Wendel Martínez



Proyecto UTP 2005